
Cuatro personajes viven voluntariamente confinado durante 24 horas rodeado de drogas, el alcohol y las interminables partidas de dominó. Un plato de cocaína es el reloj que marca el tiempo. Cada minuto se cuenta por las líneas de cocaína y los niveles de botellas de alcohol.
Una película mexicana de bajo presupuesto, aburrida, super aburrida, si debe ser el infierno, solo hay cerveza y droga y claro el juego interminable de dominó. Puntuación cero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario